domingo, 16 de octubre de 2016

Eutanasia,el valor de la vida humana

Eutanasia, hasta donde tenemos la decisión moral de terminar con una vida


El objetivo de este blog es  exponer un tema que se considera controversial, mostrar  dos puntos de vista distintos para que puedan decidir de forma personal como ver a la eutanasia. 



La muerte como episodio final de la vida, es un evento tan natural y frecuente como el nacimiento, En tiempos pasados, la mayor parte de las personas morían en casa, con todas las facilidades para tomar las decisiones pequeñas o grandes, teniendo la posibilidad de morir rodeado de sus seres queridos y familiares,  hoy en día la ciencia y la tecnología médica, ha cambiado la forma de morir que era tradicional, hoy la muerte se ha “hospitalizado”, produciendo una involuntaria deshumanización de la medicina.

Por definición La palabra eutanasia proviene de las voces griegas eu = bueno y thanatos = muerte, “Buena muerte”. Este término ha evolucionado y desde el punto de vista jurídico, es la muerte sin sufrimiento físico provocada por propia voluntad de un enfermo incurable.




Hablemos de historia y nos podremos dar cuenta de cómo cambia la idea de la muerte digna conforme pasan los años, en la Antigua Grecia la eutanasia no se planteaba como un problema moral ya que la concepción de la vida era diferente, para ellos una mala vida no era digna de ser vivida. Cicerón le da significado a la palabra como muerte digna, honesta y gloriosa. Platón dice: se dejará morir a quienes no sean sanos de cuerpo sin embargo como todo en nuestro universo tiene ideas controversiales así es como surge Hipócrates quien representa una notable excepción: prohíbe a los médicos la eutanasia activa y la ayuda para cometer suicidio y quedó plasmado en el juramento hipocrático, en el que juraba defender la vida, incluso la del moribundo. (2)

 En la Edad Media, bajo la óptica de creencias religiosas cristianas, la práctica de la eutanasia es considerada como pecado, puesto que la persona no puede disponer libremente sobre la vida, que le fue dada por un ser sobrenatural. Las religiones monoteístas como la católica, entienden que el privilegio de la vida, implica conocer la muerte, por lo que se debe estar plenamente consciente del momento final para despedirse de familiares y amigos y poder presentarse en el más allá con un claro conocimiento del fin de la vida.

Con la Modernidad, la ciencia, quien ve la vida completamente distinta a la religión se desarrollan no solo tecnologías y avances en el campo de la salud también un cambio en la ideología y le manejo de los pacientes Francis Bacon en 1623, defiende que la muerte de un enfermo ayudado por el médico no constituye un problema religioso ya que es al científico a quien le corresponde determinar cuándo un hombre enfermo debe morir o no. Tomás Moro 1516, presenta una sociedad en la que los habitantes justifican el suicidio y también la eutanasia, a fines del siglo XIX, en América del Sur existía la persona del despenador o despenadora, encargada de hacer morir a los enfermos desahuciados a petición de los parientes.


En el presente, se sustentan diferentes opiniones sobre la eutanasia y son variadas las prácticas médicas y las legalidades en distintos países del mundo, actualmente la eutanasia solo es legal en el estado de Oregón Estados Unidos, Holanda, Bélgica y Luxemburgo mientras que el Suicido asistido, es decir cuando el paciente se auto administra un medicamento letal recetado para terminar con su vida solo es legal en Suiza y España.

Resultado de imagen para estadisticas de eutanasia en el mundo



El caso mas estudiado es el de Holanda, los casos de eutanasia de registran cada 4 o 5 años, en 1990 de produjeron 2.447 casos de eutanasia, 3,120 en 1995, 3,088 en 2001, 2,871 en 2005 y 2,636 en 2009. 

Tabla 1. Datos de Holanda respecto a la eutanasia en años comprendidos entre 1990 y 2009

Como se puede observar la legalización de la eutanasia no ha producido un aumento de los casos, mas bien una reducción controlada y una asistencia adecuada y bien dirigida a estas personas en su libre derecho de elección

Hablemos de Moral, ¿hasta qué punto tenemos derecho para decidir?  ¿Hasta donde los derechos humanos son respetados o sobrepasado en las decisiones a nuestro cuerpo y vida o el fin de la misma por razones médicas?

El derecho de una personal a cómo y cuándo morir (autonomía) parece entrar con colisión con otros valores significativos, como la salvación y la prolongación de la vida humana. El principio de autonomía tiene su equivalente en lo que otros han dado en llamar el concepto de “Libre albedrío”, esto es, la libertad y capacidad plena para decidir nuestras acciones y plasmar nuestra conducta; en pocas palabras, la facultad de autodeterminación

Sin embargo siendo realistas a lo que vivimos hoy en dia el derecho moral del paciente al respeto de su integridad y autonomía, no es absoluto. Cuando ese derecho entra en conflicto con el de la integridad de otras personas.

El debate sobre la moral de la eutanasia ha llegado a exacerbarse tanto que incluso se han creado asociaciones que claman por el reconocimiento de un legítimo derecho a morir con dignidad. El movimiento para la legalización de estas prácticas comenzó en Inglaterra en 1935, con la creación de la Asociación por la Legislación de la Eutanasia, años después se funda otra asociación con el mismo objetivo en Estados Unidos.

Un ejemplo de este debate en la práctica médica se presenta al diagnosticar a una persona con muerte cerebral. Veamos ambos lados de la moneda:

·         Primero, considerar como  acertado el hecho de auxiliar a morir a un paciente a quien se le haya diagnosticado muerte cerebral, lo cual evitará sufrimiento a los familiares, al personal médico y paramédico, evitará gastos de recursos materiales y humanos, dando la posibilidad de brindar atención especializada a otros y variados pacientes cuya expectativa de vida puede ser mejor. Sin olvidar la donación de órganos que puede ser resultado de esta condición, dando lugar a nuevas expectativas de vida en más personas.

·         Por otro lado mantener el criterio de que aunque la persona no puede realizar ninguna de sus funciones por sí mismo, sus órganos vitales no dejarán de funcionar mientras reciba ayuda médica y especializada, consideran que no se tiene poder sobre la decisión de otra persona, según el concepto de lo espiritual y de la integridad de cada persona.


 

La ciencia y la tecnología, ¿nos ha deshumanizado?

Con los avances tecnológicos que hoy en día nos permiten alargar la vida de las personas que padecen alguna enfermedad crónica, permitiendo que veamos como viable la vida de una persona conectada a un aparato eléctrico que suple las funciones que su cuerpo debería realizar de manera automática, antes de preferir darle  la oportunidad de morir con dignidad

En la reciente película “Yo antes de ti “, vemos la historia de un hombre que tiene la vida ideal, antes de sufrir un accidente que lo deja cuadripléjico y totalmente dependiente de otras personas teniendo la tecnología a su alcance, decide terminar con su vida, aun enamorado de otra persona “  https://www.youtube.com/watch?v=_OtA4XDGcEQ


Aun con los avances tecnológicos y los recursos del personaje, este no puede concebir la vida con las limitaciones que sufre en ese momento, amaba su vida tal como era, y la ciencia no podía ofrecerle ninguna cura, ¿por qué no permitirle el derecho a la muerte digna?, y nos parece mejor tratar de convencerlo a vivir cada día de su vida con una condición que lo hace infeliz.

La integridad no es algo que tenemos, es parte de nuestro ser como humanos. No se puede transferir a nadie. Violar nuestra integridad es violar todo nuestro ser como criaturas humanas, y representa para cada persona un concepto distinto que deberíamos respetar

“El paciente terminal que adopta la eutanasia como último recurso para librarse del sufrimiento, en muchas ocasiones tiene comprometido su estado psicológico, se deprime, puede alterar aún su raciocinio y por lo tanto disminuir su capacidad de elección; si tratamos su depresión y estado psicológico es posible que mejore su actitud mental desapareciendo las ideas de autodestrucción. De la misma manera si tratamos adecuadamente el dolor y la sintomatología de estos pacientes podremos haberles dado una gran ayuda” (1)

Conclusión personal
De manera personal, considero que si la tecnología ha crecido a niveles que nos permite detectar enfermedades crónicas y darles tratamientos por plazos largos tratando de conservar su calidad de vida.  No nos encontramos a un nivel donde se puede evitar por completo que las personas sufran por causas de una enfermedad terminar en la que le destino final es el mismo, peor el camino es complejo, doloroso física y emocionalmente no solo para el que lo sufre en carne viva sino también para aquellos que lo rodean, deberíamos respetar la integridad, los deseos y la autonomía de aquel que sufre y permitirle la decisión de vivir el proceso de eutanasia.

Vemos a la tecnología como un medio para mejorar la vida, el permitir que se tenga una muerte sin dolor también debería ser visto como una forma de mejorar la vida.


Resultado de imagen para estadisticas de eutanasia en el mundo


Bibliografía:

·         1. Eutanasia: Aspectos éticos controversiales, RODRIGUEZ CASAS Rómulo César Rev. Med Hered 12 (1), 2001
·         Dilema ético de la eutanasia, Lic. Mabel Creagh Peña, Revista Cubana de Salud Pública. 2012; 38(1) 150-155

No hay comentarios:

Publicar un comentario